Montse Cabus
Montse Cabus
Por Mireia Correcher Bernet
En la historia, el dibujo aparece con un carácter propio inmerso en los restantes medios de expresión, sin embargo, hoy en día hay una apreciación del dibujo que oscila entre las actitudes de ensalzarlo como trabajo de proceso, boceto, y como trabajo terminado. En la artista que nos ocupa el dibujo está en la base de la representación artística no como un auxiliar artesanal en la línea de contorno, sino como un proceso mental, involucrando la percepción de la realidad y el método de consolidar sobre la superficie las tensiones energéticas del entorno, tanto en luz y color, formas y proporciones como en emociones y sentimientos. El dibujo adquiere un valor predominante como obra completa y autónoma.
Montse Cabus hace del dibujo la raíz de su creación, la base de su proceso creativo y el objeto donde desarrollar su sensibilidad, a través de imágenes de tendencia figurativa, alejándose de la abstracción. Es destacable la inclinación narrativa y descriptiva en la temática de sus obras donde tienden a convertirse en un medio dinámico para capturar el pensamiento creativo, para trasferir sobre el papel o el lienzo ideas e historias, metáforas y alegorías de lo cotidiano. A través del dibujo expresa su relación con la naturaleza, como se identifica con ella, ya que todos somos la misma cosa. En la serie que sirve de ilustración a este escrito, lo expresa a través de los árboles como fuente de inspiración, haciéndolos partícipes de esta comunión. Así es como lo siente, así es como lo representa.