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Art descalç per la Terra (Arte descalzo por la Tierra) es una propuesta participativa impulsada por la entidad sin ánimo de lucro Justícia i Pau de Barcelona y liderada por unos 25 artistas de diferentes ámbitos. Iniciado a finales del 2022, se ha desarrollado a lo largo del 2023 a través de diversas etapas, en las que han participado más de 300 personas y ha culminado en una muestra de arte colectiva en el Centro Cívico de la Barceloneta. El proyecto se basa en el compartir gratuito de los participantes y no incluye ningún beneficio económico.
La Tierra, nuestro planeta vivo, el único de los conocidos que tiene vida, está abocada a una crisis ecológica sin precedentes en los últimos millones de años, provocada por el funcionamiento de los humanos en los últimos dos siglos. La globalización de un sistema capitalista basado en el uso de combustibles fósil y en el consumo de bienes innecesarios de una parte de la población mundial, ha comportado un vertiginoso calentamiento global, una reducción drástica de los ecosistemas naturales, una tasa de extinción de especies inaudita y unas trágicas migraciones humanas de tremendas dimensiones. Nos encontramos ante el mayor reto que ha afrontado nunca la humanidad. Pero, sorprendentemente, la exhaustiva descripción científica de los hechos y la predicción del colapso al que nos abocamos, no ha sido suficiente para detenerlo.
Pero «descalzo»… ¿por qué? Esta palabra indica muchas cosas que seguramente se intuyen: Ir descalzo significa estar en contacto directo con la Tierra, sentirla con la propia piel, recuperar en cierto modo nuestra forma biológica y desnuda de andar, de formar parte de la biosfera; de movernos con respeto. Ir descalzo también indica cierta pobreza o una actitud de humildad; una actitud desde la que queremos situarnos, tanto en relación con el Arte como con la Tierra; no creernos más importantes de lo que somos y renunciar a todo lo que está de más. Humildad en cuanto a la Tierra, porque somos hijos de la Tierra y nuestra vida depende de ella, de sus leyes, de sus equilibrios que pretenciosamente hemos menospreciado. Humildad en cuanto al Arte, porque entendemos el arte como una capacidad intrínseca de todo ser humano, por más que algunos, que tienen una especial sensibilidad, se singularizan por hacer de éste un camino vital que es luz para otros.
Pero hay aún más; descalzarse es el gesto que, en muchas culturas y tradiciones espirituales, se hace al entrar en un lugar sagrado; y es que queremos reconocer abiertamente la sacralidad de la Tierra, y todo el universo como un Todo que nos trasciende y al cual pertenecemos. Coincidimos con la visión de destacados líderes espirituales de la actualidad (del cristianismo el papa Francisco y el patriarca ortodoxo Dimitrios, y los recientemente desaparecidos Thich Nhat Hanh del budismo y Bhai Sahib del sufismo, entre otros) según la cual la pérdida del sentido sagrado de la naturaleza y de la propia existencia es la causa última y al mismo tiempo consecuencia de la disociación suicida que nos desvincula de la vida.
¿Y el Arte? Admitiendo que los problemas complejos requieren soluciones complejas, procedentes de los diversos ámbitos de sabiduría, creemos firmemente que uno de los caminos que puede ayudarnos a volver a establecer estos vínculos profundos con la Tierra es el Arte, porque el Arte conoce el lenguaje de la belleza, que es inherente a la naturaleza y al espíritu; porque el Arte se abre paso por encima de las constricciones de la racionalidad y, a través de las emociones, lleva el alma humana al lugar de comunión espiritual profunda con la realidad, donde su misterio y su trascendencia tienen cabida; porque el Arte crea comunión también entre las personas. ¡Esperamos que el arte, vivido de esta manera, tenga más capacidad de sacudir nuestra pasividad que la escasa influencia que están teniendo la razón y la ciencia!
Este proyecto se plantea a base de ediciones bianuales, cada una de ellas centrada en uno de los conflictos de la humanidad con la Tierra y por la Tierra y constituida por cinco etapas o momentos clave. Desde la primera hasta la última, estas son lideradas y organizadas por JP junto con los artistas y se difunden para invitar a participar en a cualquiera que lo desee (artista o no), gratuitamente con previa inscripción. Esta 1ª edición del proyecto se centra en los conflictos por los usos de la tierra, por los que de forma sostenida se va reduciendo la extensión de ecosistemas naturales y cultivos sostenibles y millones de personas son desposeídas de sus tierras o abocadas a vivir en un entorno degradado.
El primer momento clave fue el Encuentro de Meditación por la Tierra a través del Arte, que se realizó en Vil·la Joana (Parque Natural de Collserola) el pasado mes de noviembre, con el objetivo de iniciar juntos un itinerario de comunión espiritual con la naturaleza, desde una perspectiva integradora de las diferentes sensibilidades y trayectorias. Participaron en él unas ochenta personas.
El segundo fue la matinal Con los pies en el suelo, a principios de marzo en San Jerónimo de la Murtra (Parque Natural de la Sierra de Marina), donde nuevamente participaron unas ochenta personas, con el propósito de conocer mejor y críticamente cuáles son actualmente los conflictos por los usos de la tierra, a partir del testimonio de activistas y personas comprometidas.
Desde esa apertura espiritual y desde esa conciencia crítica se abrió paso a la 3ª etapa, el Tiempo de Creación, a lo largo del cual cada artista ha estado trabajando en una obra para presentar en la Muestra de Arte; un tiempo personal de interiorización y creación en sintonía con el proyecto y con el tema de este año. Como en las ocasiones anteriores, esta etapa se ha completado con un espacio de acompañamiento gratuito al público que deseara hacer una experiencia de conexión con la naturaleza a través de la creación artística: Los Talleres de Arte descalzo en el Delta del Llobregat del pasado mes de abril, en los Espacios Naturales del Remolar-Filipinas (ecosistemas amenazados por el proyecto de ampliación del aeropuerto de BCN) donde se inscribieron unas setenta personas. Además, durante este tiempo, algunas de las artistas que trabajan con jóvenes han coordinado un total de unos 200 chicos y chicas que han realizado un gran mosaico colectivo que se expone junto con las obras de los artistas y participantes en los talleres.
Este itinerario ha culminado en la 4a etapa: la 1ª Muestra de Arte descalzo por la Tierra, acogida en el marco de actividades del Centro Cívico de la Barceloneta, con el cual se ha producido una bonita sinergia y reciprocidad. En consonancia con todo el proceso, la muestra no se ha limitado a una simple exposición, sino que se ha acompañado de una diversa oferta de actividades y talleres gratuitos y abiertos a todo el mundo, para promover una experiencia vivencial de la misma: Acto de inauguración con arte en vivo, visita guiada, talleres como el de Contemplación de la Belleza de la Naturaleza a través del Arte, Sentir la tierra con nuestras manos, Ikebana. Arte floral en armonía con la Naturaleza, Creación Viva. Arte colectivo inspirado en la Naturaleza o el encuentro Arte, Naturaleza y Espiritualidad. Jóvenes de distintas creencias en diálogo.
A partir de este momento y hasta el mes de mayo de 2024 se desarrollará la 5a y última etapa de esta edición: La itinerancia de la muestra por diferentes centros culturales, espirituales y sociales de Cataluña, suscitando en cada lugar la participación activa de los diferentes colectivos que la acogen, organizando nuevas actividades y talleres en sintonía con el proyecto. Al final de este periodo, las obras serán devueltas a los artistas.
Hasta este momento hemos podido constatar que Arte descalzo por la Tierra ha nacido con vitalidad y razón de ser; y que su carácter orgánico entraña inseparablemente una gran fuerza y una gran fragilidad: el sincero anhelo de una nueva manera de vivir como humanos en armonía profunda con la Tierra, compartido desde la humildad y la donación gratuita. La energía de la entidad JP y del colectivo de artistas determinarán su longevidad; pero tanto si su ciclo de vida es corto como si es largo, creemos que habrá aportado frutos y semillas de renovación. ■
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